El denominado nearshoring o relocalización de centros de producción ya comenzó a rendir frutos en México. Tan solo en 2023, nuestro país reemplazó a China como el principal socio comercial de Estados Unidos, alcanzando un comercio entre ambos países de casi 600 mil millones de dólares.
Asimismo, la Secretaría de Economía reportó que, durante los primeros tres trimestres de 2023, la Inversión Extranjera Directa (IED) en México aumentó 2.4%, alcanzando los 32 mil 926 millones de dólares, el 41% provino de Estados Unidos, seguido de España (3,7%), Alemania (2,8%), Argentina (2,5%), Japón (2,4%) y Canadá (2,2%).
Esto se debe a que cada vez más empresas están trasladando parte de su producción a México debido a su cercanía con Estados Unidos, lo cual les ofrece una gran ventaja geográfica para sus operaciones.
El fenómeno del nearshoring no es nuevo, pero fue tomando fuerza como consecuencia de las tensiones geopolíticas y económicas entre Estados Unidos y China, las interrupciones en las cadenas de suministro por la pandemia de Covid-19, y la guerra entre Rusia y Ucrania.
México, como país vecino de Estados Unidos, se convirtió en un lugar estratégico para la relocalización de grandes empresas. De hecho, hasta noviembre de 2023, el Gobierno federal había anunciado más de 100 proyectos de nearshoring, con una inversión estimada de más de 40 mil millones de dólares.
Esto se ha traducido en beneficios tangibles tanto para las trasnacionales, quienes ven reducidos sus costos de transportación, disminuyen sus tiempos de entrega y, por tanto, mejoran su eficiencia; como para el país, al registrarse un crecimiento económico y la generación de empleos.
De acuerdo con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Monterrey, Saltillo, Tijuana, Ciudad de México y Guadalajara concentran 75% de la inversión de nearshoring.
La empresa Deloitte México coincide que los estados con mayor Inversión Extranjera Directa entre 2021 y 2023 fueron: Nuevo León (39%), Coahuila (12%), CDMX (11%), Guanajuato (10%), Jalisco (9%) y Durango (4%).
El 85% de esta inversión fue por el nearshoring y los especialistas prevén que en 2024 la tendencia siga en aumento debido al interés que han mostrado inversionistas internacionales.
Por otro lado, la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP) reportó que entre 2022 y 2023, México registró una demanda acumulada de 3.1 millones de metros cuadrados en parques industriales y se espera que alcance los 6 millones de metros cuadrados para 2027, lo que podría servir como termómetro de las expectativas de la comunidad de negocios en relación con la relocalización de centros de producción hacia México.
El sector económico más beneficiado en nuestro país con estas inversiones es el de la manufactura, debido a que 35% de esta producción a nivel mundial se concentraba en China.
Otros sectores que también han tenido un crecimiento importante son: el automotriz, el de enseres domésticos, el de equipo médico, el de equipo electrónico y de cómputo, así como el relacionado con los servicios financieros, inmobiliarios (sobre todo en el sector industrial) y logísticos.
Una oportunidad para las pymes
Además del impacto económico, el nearshoring fortalece la creación de empleos gracias al vínculo que las grandes empresas y los proveedores establecen.
Es aquí donde las pequeñas y medianas empresas (pymes) tienen un papel fundamental, ya que las grandes compañías que llegan al país requieren de una cadena de proveedores para cumplir con el propósito de reducir costos acercando la producción al usuario final.
De esta manera, a medida que las inversiones en México aumentan debido al nearshoring, las pymes tienen la posibilidad de integrarse a las cadenas de proveedores de compañías internacionales y crecer exponencialmente.
Sin embargo, Osmar Zavaleta, decano asociado de investigación de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey, destacó que las pequeñas y medianas empresas necesitan financiamientos para escalar sus operaciones, además de acompañamiento técnico, transferencia de tecnología, homologación de proceso, accesos y certificaciones.
“Son importantes los financiamientos para garantizar la calidad de los productos y así asegurar que las empresas que vienen tengan cabida en cadenas”, agregó.
Y es que las pymes deben tener las habilidades necesarias para convertirse en proveedores de las grandes compañías, pero es relevante destacar que la mayoría de sus clientes normalmente no pagan de contado, sino a plazos de 60, 90 y hasta 120 días y eso les genera problemas de liquidez.
En Financiera Cualli sabemos la importancia de un financiamiento a la medida de cada negocio para lograr su crecimiento, y lo complicado que resulta para algunas empresas que están en ese proceso conseguirlo en instituciones bancarias, ya que de cada 10 pymes que solicitan un crédito, 7 son rechazadas.
Por ello, las financieras certificadas resultan ser una excelente opción para solucionar su problema de liquidez de manera oportuna y flexible, para hacer frente a los nuevos retos que se presentan.
Un fenómeno que llegó para quedarse
Las principales empresas calificadoras han pronosticado un crecimiento económico importante para México gracias al nearshoring.
Fitch Ratings, por ejemplo, elevó su estimación de crecimiento en 2024 de 1.8 a 2.4%, mientras que JP Morgan elevó el aumento del PIB de 1% a 2.7%, debido al incremento en el consumo doméstico y al crecimiento de la IED, la cual se prevé que en el mediano plazo alcance los 50 mil millones de dólares.
La estimación del Banco de México es de 3%, mientas que la Coparmex estima un crecimiento de 3.4% para la economía de México, debido a un consumo doméstico dinámico, un aumento significativo de la inversión, tanto nacional como extranjera, y una actividad económica estadounidense mayor a la pronosticada.
Para lograr el éxito del nearshoring y seguir siendo un mercado atractivo, México debe dar certidumbre a las grandes empresas interesadas en invertir con la preservación del Estado de derecho, el combate a la inseguridad, acceso a energías limpias, desarrollo de infraestructura para una conectividad eficaz, incentivos fiscales, así como más servicios públicos.
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